En el partido inicial del grupo G, considerado por muchos el grupo de la muerte, las selecciones de Costa de Marfil y Portugal no se hicieron el más mínimo daño y empataron sin goles.
El partido jugado en Puerto Elizabeth, en el estadio Bahía de Nelson Mandela no fue tan atractivo como se esperaba, puesto que ambas escuadras buscaron neutralizar el juego del adversario con su gran potencia física. El equipo marfileño contó los 90 minutos con el mediocampista del Barcelona Yaya Touré, quien tuvo un desempeño aceptable.
Por el equipo portugués el más peligroso fue Cristiano Ronaldo, pero no pudo concretar en arco rival. Para la segunda etapa, el sueco Sven Goran Eriksson metió a la estrella del equipo Didier Drogba, que jugo con una protección en su brazo izquierdo. El delantero del Chelsea tuvo una ocasión sobre el final, la cual falló increíblemente.
El partido culminó con un pobre 0 a 0 y ambos esperan obtener sus primeros tres puntos en el próximo partido.
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